Hígado y Primavera

La primavera está conectada con el hígado y la vesícula biliar, siendo este período del año uno de los de mayor funcionamiento por parte de estos órganos. Los procesos químicos involucran al hígado, lugar alquímico de nuestro organismo encargado de la transformación y síntesis de todos los principios nutritivos. Los poros de la piel se abren y podemos expulsar gran parte de los tóxicos, oxigenándonos.

Este órgano trabaja sin parar para deshacerse de sustancias tóxicas y realiza más de 500 funciones entre ellas: metabolizar las grasas, convertir la glucosa en glucógeno, almacenar hierro y depurar toxinas.

Síntomas de un hígado sobrecargado

Un hígado sobrecargado provoca múltiples síntomas en la persona, que se ven aumentados en la época primaveral:

  • Cefaleas y vértigos
  • Insomnio y cansancio matutino
  • Acidez, digestiones lentas y mal aliento
  • Sudoración excesiva
  • Piel grasa
  • Estreñimiento
  • Sinusitis/Rinitis
  • Conjuntivitis
  • Caída de pelo y uñas
  • Pesadez de hombros
Alimentación en primavera

Para mantener un hígado saludable debemos evitar comer en exceso, sobretodo de noche, que es cuando el hígado se regenera. Y es importante reducir el consumo de harinas, grasas, fritos, azúcares y controlar los lácteos y la proteína animal.

La naturaleza en primavera nos regala verduras y hortalizas que son especialmente indicadas para la depuración del cuerpo. Una dieta detox antes de empezar la estación o justo al inicio, es muy recomendable para empezar con fuerza.

Amargo y ácido

Hay muchos alimentos que nos pueden ayudar a mantener el equilibrio de nuestro hígado cada día, así como acelerar el proceso de depuración: las crucíferas, los vegetales amargos como endivias, espárragos, alcachofas, escarola, rúcula, apio, rabanitos, daikon y sus hojas, shiitake, cebolleta, guisantes, la parte verde del puerro, el aguacate, las algas, germinados de alfalfa… En cuanto a la manera de cocinarlas, se pueden hacer al vapor, escaldadas, en salteados cortos, en sopas y/o cremas.

Podemos condimentar con especias como la cúrcuma o utilizar el vinagre de arroz o el limón, el miso, la umeboshi y los picles, pues el sabor ácido estimula la secreción del hígado. También las infusiones depurativas como diente de león, cola de caballo, alcachofera, boldo, cardo mariano, o el té verde bancha y kukicha.

Desde Candra te animamos a probar una de las dietas depurativas clásicas de Kundalini Yoga: la DIETA VERDE.

Hígado y Kundalini Yoga

En Kundalini Yoga hay muchísimas series y kriyas que trabajan el hígado y nos ayudan a desintoxicarnos. Algunas posturas suponen un masaje interno a través del diafragma, sobre todo si van acompañadas de respiración de fuego, otras presionan la cavidad abdominal o aumentan la tensión sanguínea… Las extensiones de columna también involucran el hígado, la elevación de piernas en un ángulo de 60º, o la realización de ejercicios asimétricos que trabajan sobre el lado derecho, donde éste se aloja.

¡Ven a Candra y practica con nosotras una de las kriyas más interesantes para el hígado!

¡Ponte en forma esta primavera!

Imagen de Marijana en Pixabay

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